Nunca sucederá la autosuficiencia de combustibles en México

Nunca sucederá la autosuficiencia de combustibles en México

¿En la actualidad México está en proceso de alcanzar la autosuficiencia en los combustibles a través de las inversiones en el sistema de refinación, la construcción de una refinería y el mejoramiento del mercado actual?

Realidad de la autosuficiencia: en la actualidad existe una producción entre crudo y condensado de mil 806 millones de barriles diarios (mbd), de los cuales, a junio de este año se enviaron en promedio 950 mil barriles diarios al Sistema Nacional de Refinación (SNR) y se han exportado 850 mil barriles.

El SNR utiliza en promedio 58 por ciento de su capacidad instalada, y por cada barril de entrada, produce 32 por ciento de gasolina, 20 por ciento de diésel (15 por ciento de bajo azufre o UBA) y 4 por ciento de turbosina.

La demanda actual de gasolina es de 794 mil barriles diarios en promedio en 2024, y de los cuales 61 por ciento es importado (incluido lo enviado por Deer Park) y 39 por ciento es producido en México. El diésel, de una demanda de 367 mil barriles, es importado en 52 por ciento y solo produce 48 por ciento. La demanda de turbosina es de 96 mil barriles, de los cuales se importa 63 por ciento y solo se produce 37 por ciento.

No obstante, esto está por cambiar, de acuerdo con los datos proporcionados por Petróleos Mexicanos (Pemex), la Secretaría de Energía (Sener) y el poder Ejecutivo, en función de las acciones llevadas a cabo hasta el momento.

El mundo ideal de la autosuficiencia: una producción entre crudo y condensados de mil 852 mbd. Se destinarán mil 130 mbd al SNR (operando a 70 por ciento de su capacidad), 306 mil barriles a la Refinería Olmeca (a 90 por ciento de capacidad) y 416 mil barriles a exportación (incluido lo enviado a Deer Park).

La demanda de gasolina prevista es de 820 mil barriles diarios y solo sería cubierto 44 por ciento por parte del SNR (70 por ciento de su capacidad), 20 por ciento por la Refinería Olmeca (90 por ciento de capacidad), la reconfiguración de Tula y Salamanca con 8 por ciento (hasta 2026) e importaríamos 28 por ciento (incluido lo enviado por Deer Park). No seríamos autosuficientes.

En lo que respecta al diésel, podremos alcanzar la autosuficiencia al contar con una demanda de 420 mil barriles diarios, y 54 por ciento será garantizado por el SNR, 27 por ciento por la Refinería Olmeca y 27 por ciento por la reconfiguración de Tula y Salamanca. Aquí existe un problema, solo sería cubierto el mercado con 11 por ciento de diésel de bajo azufre de lo producido por el SNR, y por lo cual tendría México que importar 34 por ciento del total requerido de la demanda.

La turbosina, de una demanda de 105 mil barriles, 43 por ciento se produciría en el SNR y 57 por ciento se seguiría importado (incluido lo de Deer Park).

En resumen, en la perspectiva ideal, no será factible contar con una capacidad autosuficiente en gasolina y turbosina, y posiblemente lo lograríamos si no tuviéramos la necesidad de contar con todo el mercado de diésel de bajo azufre.

El mundo real de la autosuficiencia: hay disponibles entre crudo y condensados, con las proyecciones actuales, una posible producción de mil 852 mbd, de los cuales, 968 mil se enviarán al Sistema Nacional de Refinación (operando a 60 por ciento de su capacidad), 170 mil barriles a la Refinería Olmeca (a 50 por ciento de capacidad) y 714 mil barriles a exportación (incluido lo enviado a Deer Park). Pero cambiaría en 2026, cuando la Refinería Olmeca opere por arriba de 90 por ciento, reduciendo las exportaciones a 544 mil barriles, y esto disminuiría ser parte de los países productores.

La demanda esperada de gasolina es de 820 mil barriles diarios, de los cuales solo serán cubiertos 38 por ciento por parte del SNR (60 por ciento de su capacidad), 10 por ciento por la Refinería Olmeca (50 por ciento de capacidad), para la reconfiguración de Tula y Salamanca 1 por ciento y la importación 51 por ciento (incluido lo enviado por Deer Park). No seríamos autosuficientes en 2024. En 2026, con la terminación de la reconfiguración y puesta en marcha de la Refinería Olmeca a 90 por ciento, la importación se reduciría 34 por ciento y el SNR se mantendría a 60 por ciento de su capacidad, no seríamos de ninguna manera en autosuficientes en el mercado de gasolinas.

Con una demanda de 420 mil barriles diarios, a 2026 seríamos autosuficientes, pues 46 por ciento será cubierto por el SNR, 27 por ciento por la Refinería Olmeca y 27 por ciento por la reconfiguración de Tula y Salamanca. No obstante, al igual que lo ideal, se encuentra solo 11 por ciento de diésel de bajo azufre del total producido por el SNR, y al contar con el mercado de este tipo de diésel, se requiere importar 36 por ciento del total requerido de la demanda.

La turbosina, de una demanda de 105 mil barriles, 37 por ciento se produciría en el SNR y 63  por ciento seguiría importado (incluido lo de Deer Park).

No lograríamos la autosuficiencia en combustibles.

Conclusiones: no seríamos autosuficientes con gasolina en lo proyectado ideal y lo real, siempre estaríamos importando, y esto puede aumentar en una mayor proporción si la demanda está por arriba de lo estimado. El SNR no estará a más de 70 por ciento de su capacidad, y esto se verá mermado si no puede mantener la operación durante un mayor tiempo. Algunas refinerías pueden llegar a su vida útil o no operar de manera adecuada. Se requiere la búsqueda de alternativas novedosas para la gasolina, las cuales puedan obtenerse con un octanaje de salida menor en las refinerías, y la posibilidad de incrementar su contenido en mezclados, tal como se hizo con el uso de etanol en Estados Unidos, así como otros aditivos que contribuyan a disminuir los costos y, sobre todo, el estrés en las refinerías. Pemex importa 75 por ciento del total que se trae a México, incluida una parte de Deer Park. La Refinería Olmeca solo cubrirá de 20 a 22 por ciento del total de la demanda y no se incrementará este valor durante la vida del complejo.

En lo que respecta al diésel, no seremos autosuficientes, dado que el mercado debe utilizar en su totalidad diésel de bajo azufre, lo cual implica la continua importación de este combustible. Esto es lo más probable, ya que en el T-MEC está dispuesto en el capítulo de la parte ambiental utilizar combustibles que contribuyan a reducir los efectos contaminantes al medioambiente. La Refinería Olmeca producirá diésel de bajo azufre y solo cubrirá 30 por ciento del total de la demanda, mientras que con la reconfiguración en 2026 de Tula y Salina Cruz producirá 55 por ciento del total de la demanda. Se requiere invertir para reconfigurar a las otras refinerías, incorporar más plantas que puedan reducir la cantidad de azufre o hacer un nuevo ciclo adicional que vuelva a tratar el diésel. Actualmente Pemex importa 70 por ciento del total que es introducido a México de mercados externos.

Respecto a la turbosina, se continuará importando debido a la falta de producción. Pemex importa ciento por ciento de este producto.

La realidad es otra. La proyección ideal o real es que México seguirá importando ante la falta de claridad sobre los tipos de combustibles, ya no solo por el volumen de producción, sino por la calidad requerida, como en el caso del diésel UBA.

La autosuficiencia es un buen propósito, pero la realidad dista mucho de lograrlo.
https://www.milenio.com/opinion/ramses-pech/columna-ramses-pech/nunca-sucedera-la-autosuficiencia-de-combustibles-en-mexico

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